El senador Guillermo Jenefes propondrá la modificación a 22 artículos del proyecto de radiodifusión. Es, por lo menos, lo que adelantó a algunos pares del bloque oficialista para que nadie se sorprenda de su postura en contra de esa iniciativa. El senador jujeño evitó confirmar la especie. Pero su postura cobra importancia porque Jenefes preside la estratégica comisión de Sistemas, Comunicación y Libertad de Expresión, e integra además otras dos comisiones de las cuatro del plenario donde se debate el proyecto.
         En Jenefes están puestas todas las miradas y las presiones. Por lo pronto tiene la posibilidad de neutralizar la pretensión oficial de sancionar esta ley, negándose a firmar el despacho de la comisión que preside.
         Es que el reglamento de la Cámara alta dispone que cada comisión debe emitir dictamen por separado. Y si no hay dictamen de una sola de las cuatro comisiones no puede haber debate en el recinto y si no hay debate, no hay ley.
         Desde el oficialismo dejaron trascender que Jenefes propondrá correcciones al articulado de la ley en el tratamiento en particular. Y nadie del bloque K salió a criticarlo. Esto parece indicar que Jenefes, como contrapartida, estaría dispuesto a poner su firma en el dictamen votando «en disidencia parcial», para que así el kirchnerismo pueda tener dictamen y poder así concretar la sesión y el debate.
         Pese al silencio de Jenefes se supo que el senador, cuando llegue el momento de la discusión en particular pedirá cambios a los artículos más cuestionados referidos a la autoridad de aplicación, en los que el Gobierno tendrá mayoría.

         Otro asunto que preocupa a Jenefes es el artículo 161 que establece el plazo de un año para que los dueños de licencias se desprendan de los activos.
         El senador jujeño solicitará además modificaciones a aquellas claúsulas que vulneren derechos adquiridos como las que legislan sobre incompatibilidades. También está en contra de una imposición a los privados para financiar el sistema público, entre otros temas.
         Por su parte, los bloques opositores están convencidos de que podrán introducir cambios en el debate en particular.

         El radicalismo está trabajando en un dictamen propio y busca sumar aliados, el PJ disidente rechazará de plano el proyecto y luego se sumará en la discusión en particular para tratar de cambiar algún artículo, para que el proyecto vuelva a Diputados.
Como ya lo hemos informado, ayer el vicepresidente Julio Cobos volvió a reunir a la comisión de labor parlamentaria para tratar de arribar a una postura común sobre la continuidad del debate en el plenario de las comisiones.
         Pero no hubo acuerdo ya que los senadores del oficialismo se mantuvieron en su postura de apurar el trámite.

 

 CRONOGRAMA PARA QUE COBOS ESTÉ PRESENTE

El jefe del bloque K, Miguel Pichetto insistió ayer con la idea del oficialismo de firmar los dictámenes mañana. Pidió además en la reunión de labor parlamentaria que la sesión se realice el próximo miércoles, pero los bloques opositores exigieron que se cumpla el plazo reglamentario de 7 días y entonces la sesión se hará el viernes 9.
         ¿Porqué sesionar un viernes? se le preguntó a Pichetto, quien contestó que el oficialismo «quiere que Cobos participe del debate, para evitar cualquier suspicacia de las que se venía hablando». La presidenta Cristina Fernández viaja el sábado a la India y por ese motivo Cobos volverá a estar a cargo del Poder Ejecutivo. Si la sesión pasara al martes 13 o miércoles 14 como quería el radicalismo, se abriría paso a la especulación de que el Gobierno quiso correr a Cobos del debate.

         Otra especulación que el Vicepresidente desmintió en la reunión de ayer es la que daba cuenta de un supuesto viaje de Cobos al Uruguay para no estar en la sesión que el oficialismo quiere hacer el viernes 9.
         Cobos además le aseguró a Pichetto que si recibe un pedido de sesión especial fir